1. Conexión y emoción de sujeto:
* La sonrisa enigmática: La famosa sonrisa sutil de la Mona Lisa es cautivadora. No es demasiado expresivo, pero insinúa algo más profundo, atrayendo al espectador y haciéndolos preguntarse. En la fotografía de retratos, se esfuerza por una emoción genuina, incluso si es sutil. Fomentar su sujeto a relajarse, pensar en algo agradable o entablar una conversación para obtener expresiones naturales. Evite las sonrisas forzadas.
* los ojos: Los ojos de la Mona Lisa parecen seguirte por la habitación. Esta es una clase magistral para involucrar al espectador. En retrato, los ojos son la ventana del alma. Deben ser nítidos y el foco de la imagen. Haga un contacto visual (o la sugerencia) una prioridad. Preste atención a los reflejos (pequeños reflejos en los ojos) mientras agregan vida.
2. Composición y encuadre:
* Proporciones clásicas: La pose de la Mona Lisa y la composición general siguen los principios artísticos clásicos, creando un sentido de equilibrio y armonía. Aprenda sobre la regla de los tercios y otras pautas compositivas. Considere cómo su sujeto llena el marco y la relación entre el sujeto y el fondo. No tengas miedo de romper las reglas, pero entérralas primero.
* El uso de Da Vinci de "Sfumato": Esta técnica implica difuminar las líneas y los bordes, crear un efecto suave y soñador. Agrega profundidad y una sensación de misterio. En la fotografía, puede lograr un efecto similar utilizando una profundidad de campo poco profunda para desdibujar el fondo (bokeh) y usar iluminación suave.
* La "pose 3/4": La Mona Lisa se gira ligeramente hacia un lado, creando una pose más dinámica y atractiva que una vista frontal recta. Experimente con diferentes ángulos y poses. Un ligero giro de la cabeza o el cuerpo puede marcar una gran diferencia en el impacto de su retrato.
3. Iluminación y sombra:
* Luz sutil y sombra: Da Vinci usa hábilmente la luz y la sombra (Chiaroscuro) para esculpir la cara de la Mona Lisa y crear profundidad. La iluminación es suave y halagadora, destacando sus características mientras oculta las imperfecciones. Presta mucha atención a la iluminación. Evite una luz dura y directa que cree sombras poco halagadoras. En su lugar, busque luz suave y difusa de una ventana, sombra abierta o un reflector. Comprenda cómo la luz da forma a la cara y acentúa las características.
* El uso de la luz para suavizar las características: Da Vinci era un maestro de la luz y lo usó para suavizar y halagar el tema de la pintura. Al tomar retratos, asegúrese de que la luz no sea dura. Cuando sea posible, use difusores o superficies reflectantes para suavizar la luz e iluminar la cara uniformemente.
4. Contexto y narración de historias:
* El fondo: El fondo de la Mona Lisa es algo indistinto, pero proporciona una sensación de misterio y se suma a la atmósfera general de la pintura. Considere los antecedentes de sus retratos. ¿Agrega contexto y mejora la historia que está tratando de contar, o distrae del tema? Elija los fondos cuidadosamente.
* intriga: El misterio que rodea a Mona Lisa, su identidad y el significado de la pintura se suman a su encanto. Si bien no necesitas crear un misterio con cada retrato, piensa en la historia que quieres contar. ¿Qué aspectos de la personalidad o carácter de su sujeto quieres capturar?
5. Simplicidad y atemporalidad:
* Elegancia discreta: La Mona Lisa no es llamativa ni extravagante. Su belleza radica en su simplicidad y la habilidad con la que se ejecuta. Se esfuerza por los retratos atemporales que se verán bien en los próximos años. Evite filtros modernos o imágenes demasiado procesadas. Concéntrese en capturar la esencia de su tema.
* Enfoque en el tema: El enfoque de Da Vinci era capturar la personalidad y la semejanza del sujeto. Al tomar un retrato, recuerde que el enfoque está en capturar la personalidad y la semejanza del sujeto. No se distraiga con el fondo u otros elementos que pueden distraer del retrato.
En conclusión, aunque no empuñará pinturas y lienzos al óleo, los principios detrás de la Mona Lisa (conexión, composición, iluminación y narración de historias) son componentes esenciales de una gran fotografía de retratos. Al estudiar esta icónica obra de arte y aplicar sus lecciones, puede elevar sus propios retratos y crear imágenes que sean hermosas y significativas.