* El tema: ¿Cuánto del tema quieres incluir? Un tiro en la cabeza apretado puede funcionar muy bien en un formato vertical, pero un retrato de cuerpo completo podría beneficiarse de un formato horizontal para mostrar más de los alrededores o crear una sensación de espacio.
* El entorno: ¿Es el entorno importante para la historia del retrato? Si es así, un formato horizontal puede incluir más de fondo, proporcionar contexto y agregar profundidad. Un formato vertical puede aislar el sujeto, que puede ser útil si el entorno distrae o irrelevante.
* La composición: ¿Cómo se coloca el sujeto en el marco? Considere la colocación de los ojos, la cabeza y el cuerpo del sujeto, y cómo interactúan con el espacio negativo a su alrededor. Un formato horizontal puede crear una sensación de equilibrio y simetría, mientras que un formato vertical puede enfatizar la altura y crear una composición dinámica.
* El uso previsto: ¿Dónde se mostrará o usará el retrato? Un formato vertical puede ser mejor para los perfiles de redes sociales o fondos de pantalla de teléfono, mientras que un formato horizontal podría ser mejor para sitios web o diseños de impresión.
* El estado de ánimo deseado: Los formatos horizontales pueden sentirse más relajados y expansivos, mientras que los formatos verticales pueden sentirse más íntimos y enfocados.
En resumen, los formatos verticales y horizontales pueden ser efectivos para los retratos, dependiendo de los objetivos específicos del fotógrafo. Experimente con diferentes formatos para ver qué funciona mejor para cada sujeto y situación individual.