Opinión:Por qué Photoshop está (potencialmente) arruinando la fotografía de paisajes
La fotografía de paisajes, en esencia, solía ser capturar un momento específico en el tiempo y el lugar. Se trataba de habilidad, paciencia y una profunda conexión con el mundo natural. Pasarías horas explorando, esperando la luz perfecta, componiendo meticulosamente la toma y desarrollando cuidadosamente la película (en los viejos tiempos, obviamente). La imagen final, aunque quizás imperfecta, fue un testimonio de su capacidad para traducir la belleza del mundo real a un medio tangible.
Pero con el advenimiento de un poderoso software de edición digital como Photoshop, se ha producido un cambio. Si bien Photoshop * puede * ser una herramienta valiosa, su uso excesivo y mal uso están difuminando cada vez más las líneas entre la fotografía y el arte digital, lo que podría disminuir la integridad y el impacto del género.
He aquí por qué creo que Photoshop es, de alguna manera, arruinar la fotografía de paisajes:
* La búsqueda del "hiperreal": Photoshop permite a los fotógrafos crear imágenes que están muy alejadas de la realidad. Los colores están saturados más allá de los niveles creíbles, los cielos se reemplazan por reemplazos dramáticos, a menudo incongruentes, y los detalles se agudizan en un grado antinatural. Esta búsqueda constante del "hiperreal" crea una visión distorsionada de la naturaleza, establece expectativas poco realistas y disminuye potencialmente nuestro aprecio por la belleza genuina que ya existe. Cuando cada puesta de sol es una explosión de colores imposibles, las puestas de sol reales pierden su magia.
* Erosión de habilidad y paciencia: ¿Por qué pasar horas esperando la luz perfecta cuando simplemente puedes "pintarla" durante el procesamiento posterior? ¿Por qué componer meticulosamente una toma cuando puede recortar y manipular fácilmente la perspectiva en Photoshop? Si bien la comprensión de la composición y la luz aún son valiosas, la dependencia del postprocesamiento puede conducir a una disminución en la importancia de la habilidad en la cámara. El énfasis cambia de * ser * un fotógrafo a * ser * un artista digital que comienza con una fotografía.
* Homogeneización del estilo: Hay un "aspecto de Photoshop" distintivo que impregna gran parte de la fotografía de paisajes contemporáneos. Los cielos demasiado dramáticos, la clasificación de color intensa y el uso intensivo de técnicas como Orton Effect pueden hacer que las imágenes se sientan genéricas y predecibles. La individualidad y la visión artística única que una vez caracterizó la fotografía del paisaje se está perdiendo en un mar de similitud manipulada digitalmente. Se vuelve más difícil distinguir el trabajo de un fotógrafo de otro porque el "estilo de Photoshop" se convierte en la estética dominante.
* Autenticidad comprometida: Cuando las imágenes muy manipuladas se presentan como "fotografía de paisajes", plantea preguntas sobre autenticidad y verdad. ¿Estamos viendo una representación de un lugar real o una fantasía construida digitalmente? Esto puede erosionar la confianza en el medio y dificultar la discernir lo que es genuino y lo que se fabrica. La línea entre la interpretación documental y artística se vuelve borrosa, y a veces deliberadamente oscurecida.
* Expectativas poco realistas e impacto ambiental: La proliferación de estas imágenes hiperreas puede crear expectativas poco realistas para los espectadores. Los turistas pueden visitar lugares que esperan ver las mismas escenas dramáticas que han visto en línea, solo para decepcionarse por la realidad. Además, la búsqueda de la "toma perfecta" puede llevar a los fotógrafos a participar en un comportamiento poco ético o ambientalmente dañino, como pisotear ecosistemas delicados o perturbadores de vida silvestre, todo en aras de capturar una imagen que finalmente se manipulará fuertemente de todos modos.
contraargumentos y matices:
Por supuesto, Photoshop no es inherentemente malvado. Se puede usar de manera responsable para mejorar las imágenes, corregir imperfecciones menores e incluso crear interpretaciones artísticas que aún estén enraizadas en la realidad. También es importante reconocer que la fotografía * siempre * ha involucrado cierto nivel de manipulación, desde técnicas de cuarto oscuro hasta la elección de lente y composición.
El resultado final:
El problema no es Photoshop en sí mismo, sino el uso excesivo y el mal uso de sus herramientas. Cuando el énfasis cambia de capturar la belleza de la naturaleza a crear un espectáculo fabricado digitalmente, la fotografía del paisaje corre el riesgo de perder su alma. Necesitamos alentar a los fotógrafos a priorizar la habilidad, la paciencia y una conexión genuina con el mundo natural, y a usar Photoshop como una herramienta para mejorar, no reemplazar, la belleza que ya existe. Se esforzemos por las imágenes que sean honestas, auténticas e inspiradoras, en lugar de simplemente llamativas. Recordemos que las mejores fotografías son a menudo las que capturan un momento fugaz de verdad, no una ilusión cuidadosamente construida.