El telón de fondo:
Después de graduarme, me emocionó conseguir un trabajo como artista de efectos visuales (VFX) en una gran superproducción de Hollywood. Fue un sueño hecho realidad, pero rápidamente me di cuenta de que hacer una película implicaba un proceso muy similar al de crear un producto exitoso.
Paralelismos entre películas y startups:
1. Generación de ideas:
Así como las startups comienzan con una idea, las películas comienzan con un guión. Encapsula la visión, de forma muy parecida al discurso de una startup.
2. Preproducción:
La preproducción en el cine implica planificación y presupuestación. Las empresas emergentes combinan esto con el diseño conceptual y la investigación de mercado.
3. Creación de prototipos:
Así como las startups pueden crear un Producto Mínimo Viable (MVP) para probar la viabilidad, las películas prueban escenas a través de guiones gráficos.
4. Producción:
La producción es donde una película cobra vida, de forma similar a como las startups ejecutan prototipos en desarrollo.
5. Postproducción:
La posproducción es donde se pulen y completan las películas. El equivalente de las startups radica en las pruebas e iteraciones de los usuarios.
Habilidades transferibles:
1. Colaboración:
La creación de una película implica equipos de diseñadores, ingenieros y directores con roles específicos. Trabajar en equipos multifuncionales es esencial tanto para las empresas emergentes como para la realización de películas.
2. Resolución de problemas:
Crear cualquier producto implica desafíos y la industria cinematográfica no es una excepción. Las habilidades para resolver problemas son primordiales en ambos ámbitos.
3. Plazos y presupuestos:
Las películas tienen plazos y presupuestos estrictos, lo que refleja las presiones que enfrentan las nuevas empresas para cumplir con los plazos y optimizar los recursos.
Valor de la experiencia cinematográfica para las empresas emergentes:
1. Comentarios y Validación:
Mostrar el avance de mi película en conferencias generó comentarios invaluables de otros artistas, al igual que las nuevas empresas que buscan comentarios de los clientes.
2. Conexiones:
La industria cinematográfica le presenta una amplia red de profesionales. Algunos eventualmente se convirtieron en clientes o asesores de startups.
3. Contar historias:
Elaborar un mensaje convincente es vital tanto para las películas como para las nuevas empresas. Perfeccioné esta habilidad y la adapté a presentaciones y lanzamientos de startups.
Conclusión:
Mi tiempo en una superproducción me enseñó que las habilidades adquiridas al trabajar en una película son directamente aplicables al mundo de las startups y el desarrollo de productos. Resultó ser un catalizador para mi viaje empresarial, guiándome hacia una startup y, en última instancia, culminando en mis propios emprendimientos.