* La pose del sujeto: Un retrato de cuerpo completo de alguien de pie puede verse bien en la orientación del retrato, pero una pose más amplia, como alguien que descansa o interactúa con el medio ambiente, podría beneficiarse del paisaje.
* El entorno: Si el fondo es una parte crucial de la historia o agrega contexto al retrato, se podría preferir el paisaje para mostrar más de ella. Una cosecha de retrato apretada en la orientación del retrato a veces puede sentirse aislante.
* El uso previsto: Considere cómo se verá el retrato. ¿Es para las redes sociales (donde el retrato a menudo se prioriza), una impresión para una pared (donde el espacio de la pared y la pose del sujeto interactúan), o un banner de sitio web (donde el paisaje suele ser la mejor opción)?
* El estado de ánimo deseado: La orientación al retrato puede sentirse más íntima y enfocada en el tema. El paisaje puede sentirse más expansivo y cinematográfico.
* Los elementos de composición: Piense en cosas como las líneas de liderazgo, el espacio negativo y la regla de los tercios. A veces, estos elementos naturalmente se prestan a una orientación sobre la otra.
Cuando el formato de retrato a menudo funciona bien:
* Disparos y primeros planos
* Retratos donde quieres enfatizar la altura y la estatura
* Retratos con un fondo simple
Cuando el formato del paisaje podría ser mejor:
* Retratos que muestran acción o movimiento en un espacio más amplio
* Retratos donde el fondo es importante
* Retratos grupales (aunque el retrato también puede funcionar con una cuidadosa composición)
* Cuando desee un enfoque más ambiental o de narración de cuentos
En resumen:
Experimente con formatos de retratos y paisajistas cuando tome retratos. Considere el tema, el medio ambiente, el uso previsto y el estado de ánimo deseado para determinar qué orientación transmite mejor su visión artística. No hay una regla dura y rápida. El "mejor" formato es el que captura más efectivamente la esencia del tema y la historia que desea contar.