i. La base del fracaso:mala planificación y configuración
* [no] coloque al azar su cámara: Simplemente coloque su teléfono o cámara en la superficie inestable más cercana (libros apilados precariamente, el borde de una mesa tambaleante). Puntos de bonificación si está en ángulo torpemente.
* resultado: Borrosa, torcida y probablemente caiga y se rompa. Una perspectiva a nivel de piso de su barbilla doble tampoco es halagador.
* [no] pienses en la iluminación: Ignora la ventana gigante detrás de ti, o la dura luz de arriba. La luz del sol directo es tu enemigo. Cuanto más brillante, mejor.
* resultado: Cara sobreexpuesta, lavada o con dureza. Los aspectos más destacados y los entrecerrar los ojos se garantizan.
* [no] limpie: Abraza el caos. Pilas de lavandería, platos sucios y objetos de fondo cuestionables agregan "carácter".
* resultado: Todos se centrarán en el desorden, no en ti. Su atuendo cuidadosamente curado estará completamente eclipsado por esa pila de calcetines no coincidentes.
* [no] planee una pose: Simplemente suponga que naturalmente se verá increíble cuando se apaga el temporizador. No se necesita práctica.
* resultado: Expresión torpemente rígida, capturada de guardia. El aspecto universal de "ciervo en los faros".
* [no] enmarca cuidadosamente: Acumular o salir al azar, cortando partes de su cabeza o incluyendo demasiados antecedentes irrelevantes.
* resultado: Una composición desequilibrada y visualmente discordante. Te verás como una cabeza flotante o una pequeña mota en un mar de desorden.
* [no] considere la configuración de su cámara: Deja todo en Auto. ¿Quién necesita apertura, ISO o equilibrio de blancos?
* resultado: Una imagen borrosa, granulada o extraña. La configuración automática rara vez le dará el aspecto deseado.
ii. La ejecución del error:durante el disparo
* [no] verifique su enfoque: Espero lo mejor. ¿Quién necesita asegurarse de que la cámara esté enfocada en ti cuando dispara?
* resultado: Imagen suave y fuera de enfoque. Detalles borrosos, haciéndote parecer una mancha borrosa.
* [no] sé dónde mirar: Mira directamente a la cámara todo el tiempo, con una mirada tensa y sin parpadear. O, aún mejor, mira en todas partes menos la cámara.
* resultado: Espeluznante, antinatural e intenso. Una mirada ligeramente fuera de la cámara puede verse más natural, pero evitar el contacto visual por completo se ve incómodo.
* [no] relajarse: Continúe la respiración, atenúa los hombros y la sonríe.
* resultado: Una expresión tensa e incómoda que irradia tensión.
* [no] experimente: Toma una foto y llámalo un día. No es necesario probar diferentes ángulos, poses o expresiones.
* resultado: Estás atrapado con cualquier incomodidad que capturaste en esa toma.
* [no] utilice el temporizador de manera efectiva: Establezca el temporizador para la menor duración posible y corra en posición.
* resultado: Una foto tuya de tu sprint, luciendo nervioso y sin aliento. ¡O, aún mejor, una foto de una habitación vacía!
iii. La debacle de postproducción (opcional, pero recomendada para la falla máxima)
* [no] editar: Sube la foto cruda e intacta directamente a las redes sociales. Abraza las imperfecciones (que creaste intencionalmente, por supuesto).
* resultado: Una oportunidad perdida para mejorar sutilmente la foto.
* [no] use aplicaciones de edición con moderación: Vaya loca con los filtros y los controles deslizantes. Arrance la saturación, la nitidez y contrasta con el máximo.
* resultado: Una imagen sobreprocesada y de aspecto artificial que tiene poco parecido con la realidad.
* [no] recorte juiciosamente: Recorte la imagen al azar, cortando las extremidades o creando una composición desequilibrada.
* resultado: Una foto aún más visualmente discordante e incómoda.
En conclusión:
Siguiendo estas pautas, puede crear con confianza un retrato de autoímetro que sea poco halagador, técnicamente defectuoso y generalmente lamentable. La clave es ignorar todas las mejores prácticas de fotografía y abrazar el caos y el descuido. ¡Buena suerte (o debería decir, mala suerte)!