Si eres como la mayoría de las personas, probablemente sientas que últimamente estás pasando más tiempo frente a la cámara. Entre las reuniones de Zoom, las llamadas de FaceTime, las presentaciones de video y el contenido de video social, hay muchas formas en las que podrías terminar siendo grabado.
Para la mayoría de nosotros, hablar con un punto parpadeante en una cámara o computadora portátil se siente poco natural y algo incómodo. Esto es especialmente cierto si estás grabando contenido que no es en vivo, es decir, estás hablando, pero no hay nadie al otro lado de la cámara escuchándote.
La buena noticia es que, como ocurre con la mayoría de las nuevas empresas, hablar frente a la cámara se vuelve más cómodo cuanto más lo haces. Pero, mientras tanto, hay algunos pasos que puede seguir para que sea más fácil para usted. Estos son nuestros cinco consejos para ayudarte a sentirte más natural en una grabación.
1. Reduzca sus expectativas.
Este consejo es el punto de partida más importante. A menos que esté comenzando su viaje de video con un contenido de alto riesgo, reduzca sus expectativas. Hay algunas razones por las que puede hacer esto sin preocuparse por el impacto en sus resultados. En primer lugar, al público le encanta la autenticidad. Si te tropiezas con algunas palabras o tu perro aparece en el fondo durante unos segundos, ¡no hay problema! La gente aprecia la realidad. En segundo lugar, probablemente esté sobreestimando cuán "perfecto" debe ser su video en primer lugar. Siempre y cuando su punto se transmita y las personas puedan verlo y escucharlo bastante bien, lo está haciendo muy bien.
2. Imagina a tu audiencia escuchando.
Si está grabando un video para compartir consejos comerciales en LinkedIn, por ejemplo, imagine que algunas de sus conexiones de LinkedIn escuchan su información. Después de todo, esas personas escucharán tu contenido, pero no en el momento en que estás grabando. Imaginar su presencia puede ayudarte a sintonizar con tu audiencia, haciendo que la interacción se sienta más natural.
3. Conozca sus puntos de conversación.
Preparar los puntos clave con anticipación a menudo ayuda a controlar los nervios mientras filma. Si sabes que eres alguien a quien le va mejor cuando habla improvisadamente, ¡adelante! Alternativamente, si sabe que trabaja mejor con un guión completo para mirar, eso también funciona. Haz todo lo que sepas que te ayudará, pero muchas personas descubrirán que tener algunos puntos de conversación preparados te permite liberar el estrés de olvidar mencionar algo importante sin dejar de sonar natural ante la cámara.
4. Solicite comentarios.
Si le preocupa cómo se ve su contenido o cuáles podrían ser las debilidades de su video, ¡pregúntele a alguien! Comparta su video con un amigo o familiar de confianza, o pídales consejos a sus compañeros de trabajo o a un compañero creador de contenido que admire. Una vez que esté seguro de que su contenido se transmite correctamente, tendrá menos de qué preocuparse.
5. ¡Sigue haciéndolo!
Cuanto más filmes contenido, más cómodo te sentirás con el tiempo. Por un lado, aprenderá consejos y trucos que harán que el proceso se sienta menos extraño. Una vez que comprenda los entresijos de la parte técnica del proceso, como configurar o guardar su grabación con éxito, podrá concentrarse más en cómo entrega realmente su información. Además, también te sentirás más cómodo con esa parte, solo por la exposición. ¡Síguelo! Prometemos que será más fácil.